Si nos permitimos la lectura de la minificción dominicana, no podemos dejar de mencionar principalmente El columpio de los sonámbulos (2011) de Fari Rosario, que constituye una primera muestra de la ficción breve escrita en República Dominicana, y L@s nuev@s c@níbales. Antología del microcuento del Caribe Hispano (2015), a cargo de Rafael Grillo, Pedro Antonio Valdez y Emilio del Carril, que compilaron la minificción de Cuba, República Dominicana y Puerto Rico, respectivamente. El valor de estos libros consiste en que nos permite ingresar en la lectura de una tradición, acaso hasta ahora desconocida, de la minificción no solo caribeña, sino también dominicana.No obstante, la minificción continúa surgiendo y motivando a que diversos escritores apuesten su estética literaria por la ficción breve. Una muestra de nuevos autores por este lado del planeta lo constituye la Antología Iberoamericana de microcuento (2017), compilada por el escritor boliviano Homero Carvalho, donde nuevas plumas latinoamericanas apuestan por el microrrelato como género literario. Una de aquellas voces emergentes de la nueva mini cción en esta parte del universo es el escritor dominicano Luis Reynaldo Pérez, cuyos textos previamente aparecieron en revistas especializadas y dedicadas al género de lacción breve.Si bien Pérez es reconocido como poeta a nivel internacional, ello no ha sido óbice para que sus textos narrativos vayan generando un valioso espacio en los terrenos de la minificción. Es posible que aquel aliento lírico de la poesía justifique el ritmo constante que aparece en lasficciones breves que integran su libro Fractal, su opera prima en la minificción. De esta manera, el título de este libro nos re ere desde un principio una descripción sustancial de los textos que lo integran, ya que nos remite a la idea de algo que no está completo, pese a que cada microrrelato que Pérez nos presenta es autónomo respecto de los demás que integran el libro.Fractal está dividido en tres partes: ) Perverso ritual de sábados, ) Golosinas, y ) La verdadera historia de Caperucita Roja y otras pequeñas perversiones. Las dos primeras partes nos permiten apreciar que su autor conoce la tradición del microrrelato hispanoamericano, al recurrir a técnicas como la reescritura, la parodia, entre otros, así como a tratar temas trascendentales como la nostalgia y lo fantástico. Sin embargo, sobresale la tercera parte del libro donde su narrador recurre a la enciclopedia literaria básica del lector, al reescribir diversas historias vinculadas con la tradición de lo maravilloso (Caperucita Roja, La bella durmiente, Alicia en el país de las maravillas, etc.). Así, entre el narrador y el lector se produce una relación íntima que refleja un pacto de lectura necesaria para comprender los universos literarios que en esta ocasión nos presenta Luis Reynaldo Pérez.En ese sentido, resulta pertinente reconocer el trabajo de la editorial mexicana La tinta del silencio, pues con la publicación de Fractal de Luis Reynaldo Pérez nos acerca a una nueva versión de la minificción escrita en República Dominicana y a un nuevo escritor de microrrelatos, que poco a poco promete su internacionalización literaria.