María Magdalena siempre ha sido considerada «la mujer prohibida» en la tradición cristiana: representaba a la mujer salvaje, libre y pecadora. En sus enseñanzas, ella nos habla con una voz clara y amable, a veces directa y que nos confronta, pero siempre llena de compasión y respeto por la naturaleza humana.« Aunque formalmente las mujeres son iguales a los hombres, durante siglos de incomprensión y distorsión de la energía femenina se ha desarrollado una herida en el alma de las mujeres. Esta herida es el tema de este libro. La “Mujer Prohibida” es ante todo una mujer herida. »Además de hablar de la herida en el vientre de la mujer y la falta de autoestima asociada con ella, María Magdalena enfatiza igualmente la herida de la energía masculina en el corazón de los hombres, que les impide entregarse a sus sentimientos e intuiciones. Sanar esta herida en los hombres es tan importante como restaurar la fuerza del vientre en la mujer. Sin embargo, ambas heridas deben abordarse de manera diferente.Tanto para hombres como para mujeres, María Magdalena describe un camino de tres pasos que les permite volverse completos.« En este libro, quiero mostrar a las mujeres cómo pueden sanar su herida interior y dar vida a la mujer prohibida que albergan dentro de ellas mismas. Quiero mostrarles cómo pueden reconciliar las energías masculina y femenina dentro de sí, para que su autoestima crezca y mejoren sus relaciones. »Con dulzura y sabiduría, María Magdalena nos guía en la comprensión de lo que todos, hombres y mujeres, estamos empezando a sanar.Sanar la vieja herida ligada a la separación, para el mayor bien de la Humanidad.